- Estimular las capacidades cognitivas que el usuario preserva, con el fin de mantener las funciones mentales superiores y frenar su deterioro, fortaleciendo así las habilidades de procesamiento que nos permiten desempeñar acciones y conductas con un significado.
- Dotar a los usuarios de las estrategias necesarias para paliar los efectos de los déficits cognitivos en el funcionamiento de su vida diaria.